Antes de dar un paso más se detuvo, tomando el control de su cuerpo y mente, el lobo había logrado por un minuto dominarlo. Empezó a caminar en dirección contraria y en un segundo ya estaba fuera del hospital... Así que eso era sentir... Desespero e impotencia. En un minuto ya estaba en el bosque alrededor de la base. Se sentó en la tierra e intentó ver el cielo, las hojas de los árboles le obstruyeron la vista así que cerró los ojos dejando que la brisa le golpeara el rostro. -Así que quieres más-le dijo a su lobo.
-¿Estás loco?- Le preguntó David. -¡Casi te desangras! Ahora tienes anemia, ¿En que estabas pensando para contarte las venas-Gritó al ver que apenas abría los ojos, algo escalofriante para escuchar recién despiertas.
-¿En mi hermano?-le preguntó cómo respuesta a la primera pregunta.
-Aah, eso no tiene lógica, si piensas en tu hermano entonces ¿Por qué tratas de suicidarte?-
-No intentaba suicidarme, sólo quería ayudar a mi hermano con sus cicatrices-
-¿Con sus cicatrices?-
-Tenía muchas... -Dijo Daniel mirándo la venda en su muñeca. David pudo ver el semblante triste en la cara de Daniel.
-¿Qué piensas hacer ahora que sabes que tu hermano está bien? ¿Regresarás a casa?-
-No, me quedaré, voy a quedarme, tengo que esperar a que mi hermano me recuerde... O que consiga quererme por lo menos un poco-Dijo por si nunca lo recordaba.
-Daniel... ¿Quién es tu Alfa?-Le preguntó de pronto.
-No tengo alfa... -Fue todo lo que dijo.
-Lo tienes... Uno que es realmente estúpido pero lo tienes ¿Quién es? ¿Cual es su nombre?-
-No tengo, ya te dije-Se negó a hablar del tema.
-El vínculo de pareja destinada es algo imposible de romper, no se va y no puedes ignorarlo-
-¿Por qué él si puede?- Dijo con los ojos aguados.
-Tal vez no pueda y sólo finja, ¿No puedes decirme el nombre ni siquiera?-Insistió mientras sacaba un cigarrillo.
-¿Para qué quieres saberlo?- Le preguntó. -No cambia nada en que te sepas su nombre-
- Si es así que más da si me lo dices o no, puedes decirlo, no diré nada-le aseguró empezando a fumar.
-Camiel, se llama Camiel-David dejó caer el cigarrillo de su boca al suelo por la sorpresa.
-¿Él?-Le preguntó.
-¿Por qué pareces tan sorprendido?-quiso saber.
-Es mejor para ti que te rechazara-Le dijo sincero.
-¿De que hablas?- Le preguntó frunciendo el ceño -¿por qué crees que es mejor que me rompiera el corazón de esa forma?-
-Porque él... Es despiadado, no tiene alma, tampoco conciencia, si alguna vez ves a un demonio se parecerá a él-
-¿Por qué lo dices?-
-Sólo aléjate de él, de verdad Dios te hizo un gran favor al no dejar que despertaras su interés-
-Es mi pareja destinada, no tengo opción, o es él o no es nadie, y de verdad quiero una familia-
-Entonces no será nadie...- Le dijo mirándolo a los ojos -Me sorprendió que se comprometiera con Zac, pero estoy cien por ciento seguro que lo hizo para tener descendencia algún día, por esa razón tan fría,porque te aseguro que no lo ama, no creo que quiera a nadie-
-Lo amo ¿por qué si alguien va a tener su descendencia no puedo ser yo?- David lo miró sorprendido.
-¿Te estás escuchando? Suenas como un desesperado-Casi lo regañó.
-Estoy desesperado, sé que acabo de darle la razón, él dijo que era débil y patético y yo lo acabé de confirmar... Estoy enloqueciendo- Reconoció, jamás habría rogado de esa forma a nadie, de hecho hace poco estaba decidido a seguir su vida como si nada, pero verlo... -Creo que verlo me desestabilizó, todo lo que pasó... No estoy pensando con claridad-
-Sé lo que estás sintiendo, yo pasé por lo mismo, sientes como si te enjaularan y que algo te tira de los brazos, no puedes dormir, quieres salir corriendo porque te sientes incompleto y quieres lo que te falta, te ahogas y te deprimes. ¿Es eso lo que sientes?-
-Casi... -Reconoció -Tengo todos lo síntomas que dijiste, pero hay más, el lobo está más triste que yo, yo estoy triste porque mi fantasías infantiles y mis sueños no se hicieron realidad, nada de lo que quiero para mí sucedió, ni siquiera mi primer enamoramiento libre de dependencia lobuna...- Tomó aire -Pero el lobo realmente sufre, yo siento que puedo vivir con eso, pero él lobo no, siente como si se llevaran su pelaje con él, como si le arrancaran la cola o el corazón, le duele el vientre porque hay sólo una cosa que quiere más que vivir, él quiere tener su descendencia, quiere ser marcado, llenarse con sus hijos... Por eso me hace decir cosas desesperadas, porque yo siento lo que él... Sé que no me entiendes porque no hay un lobo dentro de ti, pero es similar a querer tener hijos de la persona que amas, es mucho más fuerte, porque estás ahí, dispuesto esperando algo que no llega y por eso siente dolor... Cuando tenga mi celo el lobo materializará su dolor en mi y yo pagaré las consecuencias, porque eso es lo que hace, acumula dolor y luego me lo da a mi...-
-Estaba a punto de decirte que lo que sentías por él era un obsesión que ni siquiera podría ser enamoramiento ya que jamás le hablaste ni una vez, no lo conocías ni un poco para decir que lo amabas, que era sólo un capricho. Pensé en decirte que tuviera amor propio y no rogaras por su amor y menos pelearas por ser quién lleva dentro de ti sus hijos porque a parte de eso no tendrías nada más de él, sólo el frío que da la indiferencia de una relación sin cariño, porque sólo sería un medio de darle hijos y nada más, pensé en decir que tenías que subir el autoestima... Ahora se que no actúas patéticamente porque quieras- Suspiró -Estás metido en un gran problema- dijo agotado de sólo pensar en como solucionar eso, la única respuesta que tenía para eso era que no había solución. Con algo de dolor de cabeza se acostó al lado de Daniel, que al ver lo que hacía sólo le dió un espacio en la cama de hospital.
-David, me estaba preguntando, si no tienes un lobo ¿cómo supiste que aquel niño era tu pareja destinada? ¿no pudo haber sido sólo atracción física?-
-No, no fue atracción física, ya había sentido atracción física por alguien antes y no se sintió así. Sentí que lo vi en cámara lenta, el tiempo se detuvo...- Sonrió de medio lado -Estoy seguro que me quedé mirándolo con cara de idiota cerca de media hora- Daniel sonrió -Se me olvidó respirar y casi quedo sin oxigeno para el cerebro... Sentí que era un asqueroso pervertido por desear tanto a un niño, es que algo dentro de mi gritó "es mío", y alguien en el cielo dijo "estoy de acuerdo es tuyo" Y así fue como me enteré de que era mi destinado... Creo que dejar que me lo quitaran fue lo mejor-dijo lo que pensaba.
-¿Por qué?-le preguntó Daniel.
-Yo no podría ser suficiente para él, no podría alejar a los otros Alfas de él con sólo mi olor mientras no estoy, tampoco podría satisfacerlo en sus dolorosos celos... Tampoco podría hacerle hijos. Esto es una mierda muy cruel-Se quejó por primera vez delante de él desde que lo conoció.
-Dijiste que eso fue hace tres años ¿no? Ahora debe tener...-
-Diecisiete, tendría diecisiete.-Contestó con melancolía en su voz.
Daniel se recostó la cabeza en su pecho y preguntó -¿Sabes que los celos a esa edad se hacen más dolorosos?-
-No. Ahora lo sé-
-No entiendo que haces aquí ¿no te da miedo que otro te lo quiten?-
-Si, me da miedo, pero si lo hace alguien mejor que si le puede dar lo que necesita, que sí lo pueda proteger, entonces yo estaré feliz por él-
- ¿De qué estás hablando? Eres la persona más fuerte que conozco, noqueaste a esos Alfas como si nada, imagina que un Alfa así se adueña de él, ¿crees que alguien que se deja noquear tan fácilmente puede protegerlo mejor que tú?-
-No... Pero aunque vaya por él no podré llevarlo conmigo sin el consentimiento de sus padres, aun es menor de edad-
-¿Por qué no vas a visitarlo? él tiene que saber que esperas por él-
-Ya lo sabe, me encargué de que se enterara-sonrió -Y no puedo ir, si asomo aunque sea la cabeza me la volarán de un tiro, aun tengo sobre mi un enorme castigo-Suspiró.
-¿Por qué? ¿por visitar a tu omega? eso es injusto-le hizo saber.
-No por eso. Cuando conocí a mi omega tenía que hacer una misión ¿recuerdas que te conté?- Daniel asintió -Investigaba a un tipo de alto rango, él acusó a el Alfa de su hija Mayor de haber abusado de ella y de su hermano menor, la investigación iba a cerrarse y a ese pobre alfa de diecisiete iba a ser condenado a prisión. Algo me decía que algo estaba mal, y aunque ese maldito convenció a todos con sus palabras de padre dolido yo no me lo creí y seguí investigando, sus hijos se negaban a hablar, por eso ingresé a la habitación de la hija mayor y robé su diario, resultó que el tipo violaba a sus hijos y cuando su esposa descubrió que algo sucedía culpó al pretendiente de la chica... En el diario aparecía descrito todo lo que habían pasado esos pobres chicos, por eso cuando lo ví no me aguante, saqué el arma y le volé los sesos... El diario fue tomado como evidencia, y los chicos ya no tenían miedo y testificaron a mi favor, aún así me castigaron y por eso estoy aquí, fastidiandolos hasta que me dejen regresar a mi trabajo real, la investigación.
-Wooo-Dijo Daniel sorprendido con esa historia -¿Cuando viste a tu omega?¿Antes o después?-
-Antes, luego de eso pedí su mano y ya te sabes el resto-
-¿Simplemente lo dejaste?-Se preguntaba si los Alfas podían abandonar a su pareja así de fácil. -¿lo dejaste solo?¿no te daba miedo pensar que pudiera pasarle lo mismo que a esos chicos?-
-Tuve que dejarlo. No tenía opción, y claro que me daba desconfianza e inseguridad, pero no lo dejé no lo solo, tengo a todo un equipo siguiendo sus pasos las veinticuatro horas del día-
Daniel lo miró sorprendido -Si que eres un acosador, que miedo-
-soy su alfa, estoy en todo el derecho-Se justificó.
-Tienes que ayudarlo entonces, si eres su Alfa tienes que darte prisa e ir por él, a esta edad los celos se vuelven violentos, empezará a sufrir y su familia no tardará en buscar un...-
-Eso no va a pasar-Dijo enojado de solo pensarlo -Él sabe que voy a ir por él... En algún momento, ahora sólo pienso en lo que es mejor par él, cada vez me convenzo más que que eso mejor es un Alfa-
-No deberías precipitarse, déjalo decir por el mismo, tiene que escoger entre un Alfa o David el híbrido-
-Eso sonó mal-dijo ofendido.
-Lo sé, pero me dí cuenta después de decirlo... Creo que tienes suerte de ser híbrido, así no sufres tanto y no te desestabilizas-
-He visto que los Alfas pueden ser muy inestables sin estar enlazados con su pareja, los que están en enlace tienen completo autocontrol de sí mismo, los otros tienen control pero no completo- Un bombillo se encendió en su cabeza, sus ojos se volvieron pequeños y una risa malvada sonó en su mente,no importaba, total Camiel jamás le había caído bien -Se me acabó de ocurrir algo, tal vez no funcione y no logres lo que quieres pero al menos cuando acabes habrás logrado vengarte-
-¿Qué se te ocurrió?-Preguntó Daniel curioso.
-Camiel es una persona que no soporta la insolencia, es egocéntrico, odia a los humanos, a mi en especial... No voy a mentir, es poderosamente acojonante y lo frío e inexpresivo que es sólo lo hace más escalofriante, no miento cuando te digo que absolutamente nadie es capaz de ponerse frente a él, por eso está acostumbrado a que todo se siga según lo que él dice por eso... Tienes que sacarlo de quicio- le propuso.
-Eso sólo hará que me odie más-
-Entonces no habrá diferencia, tal vez así le enseñes una lección y le dejes saber que no todo está bajo su control y palabra-
-¿Y si lo saco tanto de quicio que me golpea?-Dijo con miedo, su lobo no podría soportar un rechazo tan horrible como ese.
-Am...- Se rascó la cabeza -Él no... No lo hará-Dijo inseguro, lo había visto mandar a volar a un tipo con sólo un puño sin siquiera cambiar de expresión. -Tal vez es la única oportunidad que le puedes dar a tu lobo para que su pareja lo acepte...-
-¿Qué tengo que hacer?-
-Pues... -
-¿Estás loco?- Le preguntó David. -¡Casi te desangras! Ahora tienes anemia, ¿En que estabas pensando para contarte las venas-Gritó al ver que apenas abría los ojos, algo escalofriante para escuchar recién despiertas.
-¿En mi hermano?-le preguntó cómo respuesta a la primera pregunta.
-Aah, eso no tiene lógica, si piensas en tu hermano entonces ¿Por qué tratas de suicidarte?-
-No intentaba suicidarme, sólo quería ayudar a mi hermano con sus cicatrices-
-¿Con sus cicatrices?-
-Tenía muchas... -Dijo Daniel mirándo la venda en su muñeca. David pudo ver el semblante triste en la cara de Daniel.
-¿Qué piensas hacer ahora que sabes que tu hermano está bien? ¿Regresarás a casa?-
-No, me quedaré, voy a quedarme, tengo que esperar a que mi hermano me recuerde... O que consiga quererme por lo menos un poco-Dijo por si nunca lo recordaba.
-Daniel... ¿Quién es tu Alfa?-Le preguntó de pronto.
-No tengo alfa... -Fue todo lo que dijo.
-Lo tienes... Uno que es realmente estúpido pero lo tienes ¿Quién es? ¿Cual es su nombre?-
-No tengo, ya te dije-Se negó a hablar del tema.
-El vínculo de pareja destinada es algo imposible de romper, no se va y no puedes ignorarlo-
-¿Por qué él si puede?- Dijo con los ojos aguados.
-Tal vez no pueda y sólo finja, ¿No puedes decirme el nombre ni siquiera?-Insistió mientras sacaba un cigarrillo.
-¿Para qué quieres saberlo?- Le preguntó. -No cambia nada en que te sepas su nombre-
- Si es así que más da si me lo dices o no, puedes decirlo, no diré nada-le aseguró empezando a fumar.
-Camiel, se llama Camiel-David dejó caer el cigarrillo de su boca al suelo por la sorpresa.
-¿Él?-Le preguntó.
-¿Por qué pareces tan sorprendido?-quiso saber.
-Es mejor para ti que te rechazara-Le dijo sincero.
-¿De que hablas?- Le preguntó frunciendo el ceño -¿por qué crees que es mejor que me rompiera el corazón de esa forma?-
-Porque él... Es despiadado, no tiene alma, tampoco conciencia, si alguna vez ves a un demonio se parecerá a él-
-¿Por qué lo dices?-
-Sólo aléjate de él, de verdad Dios te hizo un gran favor al no dejar que despertaras su interés-
-Es mi pareja destinada, no tengo opción, o es él o no es nadie, y de verdad quiero una familia-
-Entonces no será nadie...- Le dijo mirándolo a los ojos -Me sorprendió que se comprometiera con Zac, pero estoy cien por ciento seguro que lo hizo para tener descendencia algún día, por esa razón tan fría,porque te aseguro que no lo ama, no creo que quiera a nadie-
-Lo amo ¿por qué si alguien va a tener su descendencia no puedo ser yo?- David lo miró sorprendido.
-¿Te estás escuchando? Suenas como un desesperado-Casi lo regañó.
-Estoy desesperado, sé que acabo de darle la razón, él dijo que era débil y patético y yo lo acabé de confirmar... Estoy enloqueciendo- Reconoció, jamás habría rogado de esa forma a nadie, de hecho hace poco estaba decidido a seguir su vida como si nada, pero verlo... -Creo que verlo me desestabilizó, todo lo que pasó... No estoy pensando con claridad-
-Sé lo que estás sintiendo, yo pasé por lo mismo, sientes como si te enjaularan y que algo te tira de los brazos, no puedes dormir, quieres salir corriendo porque te sientes incompleto y quieres lo que te falta, te ahogas y te deprimes. ¿Es eso lo que sientes?-
-Casi... -Reconoció -Tengo todos lo síntomas que dijiste, pero hay más, el lobo está más triste que yo, yo estoy triste porque mi fantasías infantiles y mis sueños no se hicieron realidad, nada de lo que quiero para mí sucedió, ni siquiera mi primer enamoramiento libre de dependencia lobuna...- Tomó aire -Pero el lobo realmente sufre, yo siento que puedo vivir con eso, pero él lobo no, siente como si se llevaran su pelaje con él, como si le arrancaran la cola o el corazón, le duele el vientre porque hay sólo una cosa que quiere más que vivir, él quiere tener su descendencia, quiere ser marcado, llenarse con sus hijos... Por eso me hace decir cosas desesperadas, porque yo siento lo que él... Sé que no me entiendes porque no hay un lobo dentro de ti, pero es similar a querer tener hijos de la persona que amas, es mucho más fuerte, porque estás ahí, dispuesto esperando algo que no llega y por eso siente dolor... Cuando tenga mi celo el lobo materializará su dolor en mi y yo pagaré las consecuencias, porque eso es lo que hace, acumula dolor y luego me lo da a mi...-
-Estaba a punto de decirte que lo que sentías por él era un obsesión que ni siquiera podría ser enamoramiento ya que jamás le hablaste ni una vez, no lo conocías ni un poco para decir que lo amabas, que era sólo un capricho. Pensé en decirte que tuviera amor propio y no rogaras por su amor y menos pelearas por ser quién lleva dentro de ti sus hijos porque a parte de eso no tendrías nada más de él, sólo el frío que da la indiferencia de una relación sin cariño, porque sólo sería un medio de darle hijos y nada más, pensé en decir que tenías que subir el autoestima... Ahora se que no actúas patéticamente porque quieras- Suspiró -Estás metido en un gran problema- dijo agotado de sólo pensar en como solucionar eso, la única respuesta que tenía para eso era que no había solución. Con algo de dolor de cabeza se acostó al lado de Daniel, que al ver lo que hacía sólo le dió un espacio en la cama de hospital.
-David, me estaba preguntando, si no tienes un lobo ¿cómo supiste que aquel niño era tu pareja destinada? ¿no pudo haber sido sólo atracción física?-
-No, no fue atracción física, ya había sentido atracción física por alguien antes y no se sintió así. Sentí que lo vi en cámara lenta, el tiempo se detuvo...- Sonrió de medio lado -Estoy seguro que me quedé mirándolo con cara de idiota cerca de media hora- Daniel sonrió -Se me olvidó respirar y casi quedo sin oxigeno para el cerebro... Sentí que era un asqueroso pervertido por desear tanto a un niño, es que algo dentro de mi gritó "es mío", y alguien en el cielo dijo "estoy de acuerdo es tuyo" Y así fue como me enteré de que era mi destinado... Creo que dejar que me lo quitaran fue lo mejor-dijo lo que pensaba.
-¿Por qué?-le preguntó Daniel.
-Yo no podría ser suficiente para él, no podría alejar a los otros Alfas de él con sólo mi olor mientras no estoy, tampoco podría satisfacerlo en sus dolorosos celos... Tampoco podría hacerle hijos. Esto es una mierda muy cruel-Se quejó por primera vez delante de él desde que lo conoció.
-Dijiste que eso fue hace tres años ¿no? Ahora debe tener...-
-Diecisiete, tendría diecisiete.-Contestó con melancolía en su voz.
Daniel se recostó la cabeza en su pecho y preguntó -¿Sabes que los celos a esa edad se hacen más dolorosos?-
-No. Ahora lo sé-
-No entiendo que haces aquí ¿no te da miedo que otro te lo quiten?-
-Si, me da miedo, pero si lo hace alguien mejor que si le puede dar lo que necesita, que sí lo pueda proteger, entonces yo estaré feliz por él-
- ¿De qué estás hablando? Eres la persona más fuerte que conozco, noqueaste a esos Alfas como si nada, imagina que un Alfa así se adueña de él, ¿crees que alguien que se deja noquear tan fácilmente puede protegerlo mejor que tú?-
-No... Pero aunque vaya por él no podré llevarlo conmigo sin el consentimiento de sus padres, aun es menor de edad-
-¿Por qué no vas a visitarlo? él tiene que saber que esperas por él-
-Ya lo sabe, me encargué de que se enterara-sonrió -Y no puedo ir, si asomo aunque sea la cabeza me la volarán de un tiro, aun tengo sobre mi un enorme castigo-Suspiró.
-¿Por qué? ¿por visitar a tu omega? eso es injusto-le hizo saber.
-No por eso. Cuando conocí a mi omega tenía que hacer una misión ¿recuerdas que te conté?- Daniel asintió -Investigaba a un tipo de alto rango, él acusó a el Alfa de su hija Mayor de haber abusado de ella y de su hermano menor, la investigación iba a cerrarse y a ese pobre alfa de diecisiete iba a ser condenado a prisión. Algo me decía que algo estaba mal, y aunque ese maldito convenció a todos con sus palabras de padre dolido yo no me lo creí y seguí investigando, sus hijos se negaban a hablar, por eso ingresé a la habitación de la hija mayor y robé su diario, resultó que el tipo violaba a sus hijos y cuando su esposa descubrió que algo sucedía culpó al pretendiente de la chica... En el diario aparecía descrito todo lo que habían pasado esos pobres chicos, por eso cuando lo ví no me aguante, saqué el arma y le volé los sesos... El diario fue tomado como evidencia, y los chicos ya no tenían miedo y testificaron a mi favor, aún así me castigaron y por eso estoy aquí, fastidiandolos hasta que me dejen regresar a mi trabajo real, la investigación.
-Wooo-Dijo Daniel sorprendido con esa historia -¿Cuando viste a tu omega?¿Antes o después?-
-Antes, luego de eso pedí su mano y ya te sabes el resto-
-¿Simplemente lo dejaste?-Se preguntaba si los Alfas podían abandonar a su pareja así de fácil. -¿lo dejaste solo?¿no te daba miedo pensar que pudiera pasarle lo mismo que a esos chicos?-
-Tuve que dejarlo. No tenía opción, y claro que me daba desconfianza e inseguridad, pero no lo dejé no lo solo, tengo a todo un equipo siguiendo sus pasos las veinticuatro horas del día-
Daniel lo miró sorprendido -Si que eres un acosador, que miedo-
-soy su alfa, estoy en todo el derecho-Se justificó.
-Tienes que ayudarlo entonces, si eres su Alfa tienes que darte prisa e ir por él, a esta edad los celos se vuelven violentos, empezará a sufrir y su familia no tardará en buscar un...-
-Eso no va a pasar-Dijo enojado de solo pensarlo -Él sabe que voy a ir por él... En algún momento, ahora sólo pienso en lo que es mejor par él, cada vez me convenzo más que que eso mejor es un Alfa-
-No deberías precipitarse, déjalo decir por el mismo, tiene que escoger entre un Alfa o David el híbrido-
-Eso sonó mal-dijo ofendido.
-Lo sé, pero me dí cuenta después de decirlo... Creo que tienes suerte de ser híbrido, así no sufres tanto y no te desestabilizas-
-He visto que los Alfas pueden ser muy inestables sin estar enlazados con su pareja, los que están en enlace tienen completo autocontrol de sí mismo, los otros tienen control pero no completo- Un bombillo se encendió en su cabeza, sus ojos se volvieron pequeños y una risa malvada sonó en su mente,no importaba, total Camiel jamás le había caído bien -Se me acabó de ocurrir algo, tal vez no funcione y no logres lo que quieres pero al menos cuando acabes habrás logrado vengarte-
-¿Qué se te ocurrió?-Preguntó Daniel curioso.
-Camiel es una persona que no soporta la insolencia, es egocéntrico, odia a los humanos, a mi en especial... No voy a mentir, es poderosamente acojonante y lo frío e inexpresivo que es sólo lo hace más escalofriante, no miento cuando te digo que absolutamente nadie es capaz de ponerse frente a él, por eso está acostumbrado a que todo se siga según lo que él dice por eso... Tienes que sacarlo de quicio- le propuso.
-Eso sólo hará que me odie más-
-Entonces no habrá diferencia, tal vez así le enseñes una lección y le dejes saber que no todo está bajo su control y palabra-
-¿Y si lo saco tanto de quicio que me golpea?-Dijo con miedo, su lobo no podría soportar un rechazo tan horrible como ese.
-Am...- Se rascó la cabeza -Él no... No lo hará-Dijo inseguro, lo había visto mandar a volar a un tipo con sólo un puño sin siquiera cambiar de expresión. -Tal vez es la única oportunidad que le puedes dar a tu lobo para que su pareja lo acepte...-
-¿Qué tengo que hacer?-
-Pues... -